El escritor tuitero crea una serie de subgéneros dentro de la red social X que le han hecho multiplicar exponencialmente sus lectores
A Salvador Gutiérrez Solís, a quien bien se le podría definir como ‘el escritor tuitero’, no le gusta hablar seguidores; él habla de personas que comparten sus historias en la red social X, antes Twitter. Cuenta con más de 155.600 lectores fieles de sus hilos, en los que narra historias, siempre de ficción, que atrapan, involucran, entretienen y sorprenden. Tanto éxito han tenido sus relatos imaginativos que ha creado incluso una serie de subgéneros dentro de la red social en la que los publica bajo el epígrafe ‘Colgados de un hilo’.
“He desarrollado una serie de subgéneros dentro de mis hilos”, explicó este viernes, durante la última jornada académica en la Facultad de Ciencias de la Educación coordinada por Verónica Triviño, en el marco de la XX edición del Festival Internacional de Poesía de Granada, que se clausuró con una actuación estelar de la cantante Diana Navarro ya por la tarde, en un Palacio de Carlos V abarrotado.
Entre sus subgéneros, como explicó ante los 300 alumnos de la Universidad de Granada (UGR) matriculados en el FIP, figuran sus episodios vecinales; la que protagonizan un periodista y un fotógrafo que se llama Paco y los reportajes que se les encargan; los que él denomina ‘taquicárdicos’ o los centrados en estafas de teléfono y de WhatsApp, como la del falso hijo que pide dinero a sus padres porque se le ha roto el teléfono móvil.
Como el propio Gutiérrez Solís explicó ante un auditorio completo en el Aula Magna de la facultad, sus historias cuentan con una serie de características comunes, como no tener nunca un final; estar escritos en primera persona y por alguien que no se identifica y de quien no se sabe nada; estar protagonizados siempre por una persona a la que le suceden cosas; y no tener localización geográfica, aunque siempre transcurren en una ciudad y en lugares comunes en todas las urbes, tales como una estación, las afueras o una fábrica. Él, como precisó, los graba en Sevilla, pero al ser escenarios genéricos logra que parezcan escenarios familiares para gente de todo el mundo. De hecho tiene adeptos en multitud de países que comparten sus historias, muchos en Sudamérica.
Interés lector
El escritor confesó sentirse muy satisfecho porque desde distintas partes del mundo educadores le pidan permiso para usar sus hilos como herramienta en las aulas, para despertar el interés lector. “Me emociona mucho cuando recibo esas peticione de profesores”, expresó tras comentar que no le gusta demasiado que lo comparen con Manuel Bartual. Tampoco le gusta, apuntó hablar de seguidores, sino que prefiere referirse a ellos como personas que comparten sus historias.
El taller impartido por Salvador Gutiérrez Solís, centrado en prácticas sobre nuevos modos de creación y difusión literaria y dirigido a los alumnos inscritos en el FIP resultó un auténtico éxito, e invitó a los alumnos a escribir entre todos un hilo. El autor escribe desde Sevilla, y uno de sus últimos hilos virales lleva como ‘hashtag’ #furgohilo, y cuenta la historia de una sospechosa furgoneta aparcada junto a un parque… Si quiere saber más, sólo tiene que buscar a @gutisolis en X.